La banda internacional de traficantes de droga estaba integrada sobre todo por colombianos y españoles, especializados también en el blanqueo de dinero.
La delegada del Gobierno en las islas, Carolina Darias, informó de que la droga tenía como destino España y se halló en una furgoneta blanca que se localizó el pasado día 17 en la capital grancanaria junto a los dos primeros detenidos de la operación. Su hallazgo activó el arresto de los demás integrantes de la banda, investigada desde septiembre de 2007.
La droga, valorada en 30 millones de euros y distribuida en 25 fardos, llegó posiblemente a Canarias por vía marítima que junto al transporte aéreo eran utilizados por el grupo criminal para el trasladar la cocaína desde Venezuela a España y Africa.
En ella se precisa que la banda trasladaba la droga en aviones desde Sudamérica a Africa occidental y en embarcaciones desde las costas africanas hasta España.
La organización estaba perfectamente estructurada y disponía de dirigentes y proveedores que operaban desde Venezuela y contaba con una oficina en Madrid, que se encargaba de coordinar las actividades de distribución de la droga y el blanqueo de capital con los miembros del grupo en las distintas provincias españolas donde operaba.
Los miembros de la banda residían en viviendas de lujo y movían importantes sumas de dinero, que en ocasiones superaban los 5 millones de euros.
En la operación llevada a cabo por la Guardia Civil, la Policía Nacional y la Agencia Tributaria, en colaboración con la agencia antidroga de Estados Unidos, también se incautó 70 teléfonos móviles, equipos informáticos y diversa documentación.
La droga y los detenidos, la mayoría de nacionalidad española y colombiana, aunque entre ellos figura un rumano y un posible peruano, han pasado a disposición de los juzgados 1 y 6 de la Audiencia Nacional.