Identifican 3 características genéticas relacionadas con el riesgo de infarto

EFE 08/02/2009 17:58

Los investigadores han determinado en una primera fase del proyecto, 2,5 millones de características genéticas (también llamadas polimorfismos) en cerca de 3.000 personas, que han sufrido un infarto agudo de miocardio antes de los 60 años, y los han comparado con los de otras 3.000 personas sanas que han actuado de control.

Los participantes del estudio procedían de EEUU, Suecia, Finlandia, Italia y España, ha informado el Instituto Municipal de Investigación Médica (IMIM-Hospital del Mar) que junto al Hospital Josep Trueta de Girona, forman parte de este consorcio internacional de investigación.

Comparando el ADN de estos dos grupos, se seleccionaron los 1.400 polimorfismos más significativos, y se reanalizaron en más de 10.000 enfermos que habían sufrido un infarto de miocardio -comparándolos a su vez con los de 10.000 personas sanas-, todos ellos individuos diferentes a las 6.000 personas que habían formado la muestra en la primera fase del proyecto.

De esta forma se confirmó un grupo de polimorfismos localizados en nueve genes, que aumentan cada uno de ellos en un 10-15% el riesgo de presentar un infarto agudo de miocardio.

Dos de estos genes identificados intervienen en el control de los niveles de colesterol en sangre y un tercero en los mecanismos de inflamación que influyen en el desarrollo de las placas de arteriosclerosis en las arterias.

Sorprendentemente, señalan las mismas fuentes, el mecanismo que explica la relación de los otros seis genes con el infarto de miocardio es del todo desconocido.

Según el coordinador del grupo de investigación del IMIM-Hospital del Mar, Roberto Elosua, "estos resultados confirman la importancia de los niveles de colesterol y de los mecanismos de inflamación, pero sobre todo abre nuevas vías de investigación para determinar nuevos mecanismos relacionados con estos seis genes que influyen en el riesgo de presentar esta enfermedad".

A la larga, su conocimiento podría contribuir al desarrollo de nuevos fármacos que aumenten las opciones terapéuticas existentes para la prevención y tratamiento de esta enfermedad tan prevalente".

Los investigadores creen que la determinación de estos polimorfismos podría permitir pronto identificar personas con un riesgo especial de presentar un infarto.

Pero, es necesario tener en cuenta, que el incremento de riesgo asociado a cada uno de estos polimorfismos es relativamente pequeño (10-15%) y que su presencia no significa que la persona portadora desarrolle necesariamente la enfermedad.

Asimismo, destacan que la posible interacción con los factores ambientales sigue siendo crucial: alimentación, ejercicio físico, abstinencia al tabaco y el control de factores de riesgo como la hipertensión, el colesterol y la diabetes.

Se calcula que cada año en España se producen entre 80.000 y 85.000 infartos de miocardio.