Los detenidos en España, la mayoría de origen georgiano, desarrollaban negocios "aparentemente legales" y están acusados de los delitos de asociación ilícita, blanqueo, coacciones, extorsiones, tráfico de drogas y tenencia de armas, aunque la imputación final podría incluir también la conspiración para el asesinato.
Al parecer, los acusados se establecieron en España por razones de ocio aunque con el paso del tiempo, organizaron actividades delictivas, dedicándose principalmente a recibir fondos de grupos ilícitos del extranjero para blanquear los capitales en España.
La operación, coordinada por la Audiencia Nacional, la está llevando a cabo la Unidad contra la Droga y el Crimen Organizado (UDYCO) central, y en ella participan también otras fuerzas de seguridad, como los Mossos d'Esquadra, ya que el grueso de las detenciones se está realizando en Cataluña.
Además, según las mismas fuentes, hay actuaciones policiales en otras zonas de España como Madrid o el País Vasco.
En el extranjero, la operación se ha desarrollado fundamentalmente en Austria, Alemania y Suiza, donde se llevaban a cabo investigaciones independientes coordinadas por la Fiscalía Anticorrupción desde España, aunque también se han producido algunas detenciones en Francia e Italia.
El dispositivo permanece abierto y los agentes continúan haciendo registros.
Los detenidos comparecerán esta semana ante el titular del Juzgado Central de Instrucción Número 3, Fernando Grande-Marlaska.
Tercera gran operación en España
La nueva operación policial es la tercera de gran envergadura que se produce en España contra este tipo de delincuencia desde el año 2000, tras las denominadas "Avispa" y "Troika".
Por el número de detenidos -más de una veintena- y los efectivos movilizados, la "Operación Java" de este lunes está a la altura de la denominada "Operación Avispa", la mayor realizada hasta la fecha en nuestro país y que en una primera fase, en junio de 2005, supuso el arresto de 28 personas. EPF