Según ha informado la Agencia Tributaria, el tabaco incautado podría haber superado en el mercado los 3,5 millones de euros, y la operación se ha saldado con el arresto de tres personas.
La operación se inició tras la llegada al Puerto de Barcelona de dos contenedores procedentes de Estados Unidos en los que la banda había suplantado la identidad de un importador habitual y había declarado la mercancía como rollos de plástico.
La Agencia Tributaria, que ya había iniciado investigaciones previas sobre esta organización, decidió hacer un seguimiento controlado de la mercancía, que fue transportada en dos camiones hasta el polígono de Manresa.
En el momento de la descarga, los funcionarios de Vigilancia Aduanera detuvieron a los tres miembros de la organización --dos españoles y un rumano-- que se encontraban a la espera para la recepción del tabaco.
El contenido de los contenedores --2.000 cajas de tabaco con un millón de cajetillas-- no había superado los controles tributarios y aduaneros, al carecer de los precintos obligatorios.
Esta operación es la más importante desde que en marzo de 2010 funcionarios de Aduanas, en colaboración con la oficina europea antifraude (OLAF), aprehendieron en Canarias más de 2,4 millones de cajetillas por un valor de 8,6 millones de euros.