Insulza no comparte la solicitud de la oposición guatemalteca para que dimita Colom

AGENCIA EFE 26/05/2009 00:00

Insulza dijo en una rueda de prensa en la delegación de la Organización de Estados Americanos (OEA) en la capital guatemalteca que "respeta" las opiniones de los grupos políticos de oposición que insisten en pedir la renuncia de Colom para que sea procesado por la muerte del letrado Rodrigo Rosenberg, quien en un vídeo grabado antes de ser asesinado lo acusó de su muerte.

Sin embargo, "no comparto esa opinión, porque no ha habido la entrega de ningún antecedente que permita respaldar esa posición", precisó.

Insulza cumplió hoy una apretada agenda de trabajo en la capital guatemalteca, donde llegó anoche para conocer de primera mano las diferentes versiones sobre el escándalo político que tiene en vilo al presidente Colom.

El secretario general de la OEA hizo un llamamiento a los guatemaltecos a "pacificar los espíritus" para salir de la crisis y aseguró que, durante las reuniones que sostuvo con los diferentes sectores del país, percibió "una amplia voluntad política" de todos sus interlocutores.

El diplomático se entrevistó por separado con el jurista español Carlos Castresana, jefe de la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), y el fiscal general, Amilcar Velásquez, encargados de investigar el asesinato de Rosenberg y sus acusaciones contra el presidente.

La CICIG, una instancia auspiciada por las Naciones Unidas que tiene como objetivo investigar y desmantelar a las mafias que se han incrustado en las diferentes estructuras del Estado para garantizarse su impunidad, ha recibido el encargo de desenmarañar la trama que envuelve este escándalo político.

"La CICIG y la Fiscalía tienen una tarea compleja y difícil, porque tienen que garantizar que en este caso no habrá impunidad", dijo Insulza.

Según el político chileno, existe de parte de todos los sectores con los que se entrevistó la "convicción de que la superación de la crisis depende del fortalecimiento de la institucionalidad democrática del país" y de los resultados de la investigación de este caso.

Esa situación, advirtió, requiere del "respeto a las autoridades que han sigo elegidas democráticamente por el pueblo de Guatemala".

"Espero que en las próximas semanas habrá avances" en las investigaciones judiciales, añadió.

José Miguel Insulza también se entrevistó con Colom, con el vicepresidente, Rafael Espada, y el canciller, Haroldo Rodas, así como con los directivos del Parlamento, la Corte Suprema de Justicia, la Corte de Constitucionalidad, y representantes de grupos de la sociedad civil.

Se reunió, además, con el general retirado Otto Pérez Molina, líder del opositor Partido Patriota, y los directivos de la cúpula empresarial y de los grupos sociales que se han organizado a partir de esta crisis y exigen la renuncia de Colom.

La crisis política que afronta el Gobierno de Colom se inició el pasado 11 de mayo, un día después del asesinato de Rosenberg, cuando se dio a conocer una grabación en la que el abogado responsabilizaba de su muerte a Colom y a su esposa, Sandra Torres; al secretario privado de la Presidencia, Gustavo Alejos; el empresario Gregorio Valdez, y altos directivos del Banco de Desarrollo Agrícola (Banrural), el segundo más grande y sólido del país.

El secretario general de la OEA, que concluirá su visita al país mañana a primera hora, descartó un deterioro de la imagen del presidente guatemalteco a nivel internacional como consecuencia de esta crisis.

"La imagen del presidente Colom en América Latina y otras partes es muy buena. No creo que haya sido perjudicada por esto", declaró.