Presentan un proyecto de ley en EE.UU. para legalizar a trabajadores agrícolas indocumentados

AGENCIA EFE 15/05/2009 01:44

Sus patrocinadores, entre ellos la senadora demócrata Diane Feinstein y el también demócrata Howard Berman, de la Cámara de Representantes, presentaron hoy el proyecto de ley, denominado en inglés "AgJobs", para estabilizar el mercado laboral en el sector agrícola del país.

No es la primera vez que los líderes del Congreso proponen la legalización de los trabajadores indocumentados en el sector agrícola, pero en esta ocasión sus promotores esperan que llegue a buen puerto bajo el Gobierno de Barack Obama.

La escasez de trabajadores agrícolas en EE.UU., explicaron Feinstein y otros legisladores en un comunicado conjunto, está ocasionando pérdidas de costa a costa en estados como Maine, California, Washington y Georgia, donde los cultivos prácticamente se pudren.

Esto hace que la economía, ya aquejada por una recesión, pierda miles de millones de dólares, pero la medida presentada hoy "contribuirá a garantizar una fuerza laboral agrícola fiable y consistente, para que los agricultores nunca más pierdan cosechas por falta de trabajadores", señaló Feinstein.

"El asunto principal acá no es inmigración, es la protección y la preservación de la economía estadounidense", enfatizó.

Según los congresistas, entre 2007 y 2008 la escasez de trabajadores paralizó las labores en al menos 405.000 hectáreas de tierra cultivable en todo Estados Unidos.

Advirtieron de que, si EE.UU. no corrige los problemas del sector con iniciativas como "AgJobs", el país puede perder entre 5.000 y 9.000 millones de dólares en ventas a la competencia exterior en los próximos dos años.

La medida, que por ahora cuenta con el patrocinio de 16 legisladores en ambas cámaras del Congreso, busca reformar el programa de trabajadores temporales con visas "H-2A".

Entre sus principales elementos, la medida ofrece una "vía hacia la ciudadanía" para los inmigrantes indocumentados ya empleados en el sector agrícola.

En concreto, autoriza la creación de un programa piloto de cinco años para identificar a los trabajadores agrícolas indocumentados y legalizar temporalmente, mediante la emisión de una "tarjeta azul" con datos biométricos, a aquellos que lleven al menos dos años en los campos de EE.UU.

Los trabajadores con la "tarjeta azul" tendrán la oportunidad de solicitar la residencia permanente con el abono de una multa de 500 dólares si reúnen ciertos requisitos, como el pago de sus impuestos y demostrar que no tienen antecedentes penales.

Además, la iniciativa reforma el sistema de visas "H-2A", de manera que los agricultores puedan contar con "trabajadores huéspedes" para los tiempos de la cosecha.

Diversos grupos pro inmigrantes del país y sindicatos del sector agrícola han expresado su apoyo al proyecto de ley, aunque consideran que el Gobierno debe reformar todo el sistema nacional de inmigración.