Rosa Aguilar apuesta por la sostenibilidad y el diálogo para construir el futuro

Aguilar afirma que nadie le ha pedido que se afilie al PSOE: "saben los compañeros y compañeras que la aceptación de formar parte del Gobierno significa formar parte de un proyecto político, significa por tanto adquirir un compromiso con un programa electoral y eso es lo que yo hago cada día al frente del Ministerio".

La ministra, que cumplirá sus primeros cien días al frente del Departamento el próximo día 28, niega la existencia de ese plazo de "gracia", ya que desde el primer momento "hay una exigencia de respuesta" y porque no se puede parar un ministerio debido al nombramiento de un nuevo responsable.

Durante estos tres meses en el cargo ha trabajado en los campos que considera prioritarios de su departamento: la política agrícola común, la política pesquera común y la biodiversidad y cambio climático.

También destaca entre esas prioridades el diálogo con las ONG, con las que quiere establecer una hoja de ruta medioambiental hasta final de legislatura, y con los grupos parlamentarios, con los que quiere alcanzar acuerdos en asuntos como el agua o la política agraria.

Rosa Aguilar se muestra confiada en que tendrá tiempo para alcanzar sus objetivos, "cuando hay voluntad, hay tiempo", y reitera que éstos, tal y como dijo durante su investidura, se centran en "pintar de verde el Ministerio".

"El Ministerio -afirma- tiene un alma común que se llama sostenibilidad, y la palabra sostenibilidad la empleo desde la perspectiva de hablar de la sostenibilidada económica, de la sostenibilidad social y de la sostenibilidad ambiental".

No considera que su nombramiento sea la respuesta socialista a la creación de una nueva formación política verde, sino consecuencia de un programa electoral y de un compromiso adquirido.

Tras reconocer el papel que han jugado las ONG de defensa ambiental, señala que "España tiene un gobierno comprometido en las políticas ambientales" y que, "después de todas las medidas que se han adoptado, hemos dado un gran salto".

La ministra se muestra partidaria del derribo del hotel El Algarrobico (Almería), en consonancia con lo que dictaminen lo tribunales; descarta cualquier cambio de opinión en cuanto al cierre de la central de Garoña y confía en que se conocerá "pronto" la ubicación del Almacén Temporal Centralizado de Residuos Radiactivos (ATC).

También se muestra firmemente defensora de las energías renovables, campo en el que "los ritmos deben ser los adecuados para asegurar el abastecimiento de energía y, por otra parte, no perder el camino que hemos emprendido".

En lo que se refiere a la gestión del agua, Rosa Aguilar es optimista respecto a la posibilidad de llegar a un gran acuerdo estatal que solucione los conflictos entre territorios.

"En el tema del agua -declara- hay mucho camino recorrido y en este sentido la situación actual es mucho mejor que la situación anterior; no en vano se han hecho grandes inversiones en el conjunto de las CCAA".

Junto a estas infraestructuras, la ministra cita los planes de cuenca como herramientas esenciales para solucionar el problema.

"Si nucleamos consensos importantes en torno a los planes hidrológicos de cuenca -señala- estaremos a un paso de llegar a un gran acuerdo", siempre y cuando haya voluntad política de "dejar el tema al margen de las búsqueda de rentabilidad electoral, como ha hecho hasta ahora el Partido Popular".

En el resto de materias relativas a su departamento, la ministra declara que agricultores, ganaderos y pescadores deben "hacer suya" la política medioambiental ya que "con los que con su actividad profesional y personal cuidan el territorio".

En relación con el cultivo de organismos modificados genéticamente (OGM), considera que el debate tendría que ser de "mayor transparencia y claridad, de la mano de los científicos y con una posición común en toda la Unión Europea".

Rosa Aguilar tan sólo se abstiene de contestar a una pregunta, relativa al futuro del José Luis Rodríguez Zapatero: "en la vida hay que dar la oportunidad a las personas para que decidan ellas y, además, decidan contarlo cuando lo crean conveniente".

Añade, no obstante, que ve "cada día" trabajar al presidente y que le ve con "fortaleza e ilusión". Además, afirma tajantemente que tienen "tantas cosas que arreglar" que "no merece la pena perder un minuto discutiendo si alguien va a ser o no va a ser candidato dentro de un año y medio".