Ascienden a 235 los muertos tras el terremoto que azotó el centro de Italia

AGENCIA EFE 07/04/2009 09:40

Según este mismo balance, desde que se produjera el terremoto de 5,8 grados de magnitud en la escala abierta de Richter en la madrugada del lunes, son 17.000 las personas que han necesitado asistencia y 1.000 los heridos.

Los cuerpos sin vida encontrados entre los escombros de las poblaciones de la región de Los Abruzos, prácticamente arrasada tras el terremoto, se encuentran en el depósito de cadáveres habilitado en la escuela de la Guardia de Finanzas de L'Aquila.

Esta actualización de datos llega después de que una nueva réplica, esta vez de 5,3 grados de magnitud en la escala abierta de Richter, sacudiera a las 17.42 GMT de hoy el centro de Italia, se sintiera en Roma e hiciera temer lo peor a los cerca de 17.000 evacuados que afrontan ya la segunda noche fuera de sus casas.

Los servicios de urgencia de la capital italiana informaron horas después del fallecimiento de un anciano de 76 años en Roma, a causa de un infarto producido tras la sacudida de la tarde, la segunda mayor desde que comenzaron los movimientos telúricos en los últimos días en el centro de Italia.

Esta mañana, el primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, informó de un balance de 207 muertos en una rueda de prensa desde L'Aquila, a donde se desplazó hoy de nuevo para comprobar "in situ" las tareas de desescombro.

Poco después se conocía que los equipos de rescate habían encontrado sin vida los cuerpos de los cuatro jóvenes desaparecidos entre los escombros de la Casa del Estudiante de L'Aquila, edificio que deberá ser derribado por su mal estado.

Entre los heridos a causa del gran terremoto en Los Abruzos hay unos cien que presentan un complicado estado de salud, mientras que los evacuados deberán pasar la noche en las 2.416 tiendas de campaña habilitadas al efecto.

La última buena noticia del día respecto a la tragedia que vive Italia desde ayer es el rescate con vida de Eleonora, una joven de unos 20 años que permaneció 42 horas entre los escombros de un edificio de L'Aquila.