Ban Ki-moon advierte que la desertificación pone en peligro la estabilidad del planeta

AGENCIA EFE 17/06/2009 19:48

Enmarcado en el Día Mundial de la Lucha contra la Desertificación y la Sequía, el discurso de Ban destacó que está previsto que para 2050 alrededor de 200 millones de personas se verán obligadas a migrar de sus países a causa de la desertificación y el cambio climático.

"Después de enfrentar largos periodos de sequía, hambruna y pobreza, muchos tienen una sola opción: irse de su tierra", expresó Ban, al tiempo que lamentó que "como siempre, los pobres serán las primeras víctimas y los últimos en recuperarse".

El problema de la desertificación ya ha forzado a 24 millones de personas a dejar sus tierras y que un tercio de la tierra cultivable del planeta haya resultado afectada, lo que pone en peligro la vida y el desarrollo de más de mil millones de personas.

Ban quiso enfatizar el poder del hombre para revertir la desertificación y apuntó que "la insostenibilidad de nuestro modelo global de consumo y producción podría llevar a futuras crisis alimentarias similares a la del año pasado, así como a una desertificación continuada, degradación de la tierra y sequía".

La agricultura y la ganadería representan un 70% del consumo total de agua y producen casi un 80% de la deforestación mundial, por lo que el responsable de la ONU expresó que hay que "reconsiderar las prácticas agrícolas y de consumo de agua".

Para lograr una respuesta clara ante este problema Ban pidió a los líderes mundiales que "sellen el pacto" del nuevo acuerdo sobre cambio climático cuando se reúnan el próximo diciembre en Copenhague, y que reemplazará al Protocolo de Kyoto como principal instrumento de lucha contra el calentamiento global.

"Un acuerdo completo y equitativo para reducir el cambio climático deberá ayudar también a los países en vías de desarrollo a adaptarse al impacto que ya se está produciendo", expresó Ban.

Agregó que ese acuerdo deberá "proporcionar una financiación adecuada para mejorar la gestión de las tierras y el agua".

Aunque los esfuerzos no son todavía suficientes, el secretario general de la ONU recordó que varios proyectos del organismo internacional ya han producido buenos resultados, como el Programa de las Naciones Unidas para el Medioambiente (UNEP), que ha prevenido la desertificación en algunas regiones africanas.

Por otro lado, el Programa de Márgenes de los Desiertos de la ONU ha logrado éxitos en nueve países de África, como por ejemplo la implantación del "Sahel Apple", un árbol frutal con gran valor en el mercado que, además, contribuye a restablecer las tierras degradadas.

"Es el momento de aumentar y repetir este tipo de acciones para proteger a las comunidades más vulnerables", dijo por su parte, el director ejecutivo de UNEP, Achim Steiner, quien aseguró que "la degradación y la desertificación de la tierra no son inevitables y estos programas lo prueban".