El control gubernamental de las redes sociales en China ha provocado el encarcelamiento durante nueve días de un ciudadano apellidado Li por publicar en Wechat, el WhatsApp chino, un mensaje que las autoridades policiales han considerado ofensivo.
Según la prensa local recogida por CNN, Li compartió con amigos a través de un grupo una imagen de un perro disfrazado de policía. El can llevaba una gorra reglamentaria mientras parecía sostener con una de sus patas una placa de identificación profesional que enseñaba a la cámara.
El arresto durante nueve días y la publicidad en las redes sociales del suceso ha diparado las protestas de muchos usuarios que consideran desproporcionado el castigo sufrido por Li.
Muchos ciudadanos en China comparten este tipo de mensajes en los que la figura del perro es sustituida por un gato o personajes de dibujos animados, algo que, defienden, no debería de ser castigado con una sanción tan dura.