El documento de la SSP, que delinea la estrategia gubernamental contra el crimen organizado en el país, indica que desde el inicio de la Administración del presidente, Felipe Calderón (el 1 de diciembre de 2006), las autoridades han decomisado un total de 360,7 toneladas de marihuana.
Asimismo, se han incautado de 28,4 toneladas de cocaína, 641,5 kilogramos de cristal, 395,3 kilos de heroína, 440,1 kilos de semilla de marihuana, 801,1 kilos de efedrina y 41,7 toneladas de pseudoefedrina.
En ese periodo, las fuerzas de seguridad decomisaron además 220,3 kilogramos de goma de opio, 554.119 pastillas psicotrópicas y desmanteló un total de 49 laboratorios de producción de droga.
"México se ha convertido en un país de consumo de drogas, lo que implica una competencia por el mercado de consumo local", precisa el informe.
El estudio específica que la estrategia gubernamental contra el narcotráfico se basa en el control territorial, refuerzo de los despliegues operativos de tropas en las zonas con mayor índice delictivo, combate a las estructuras criminales e instalación de puntos de revisión mixtos.
Asimismo, conforman la estrategia del Ejecutivo las "incursiones diurnas y nocturnas", cateos específicos, "monitoreo técnico", control de aduanas, operativos en aeropuertos, traslado de reos, "operación sobre blancos específicos" y la participación ciudadana.
En el mismo lapso de tiempo los organismos de seguridad mexicanos han detenido a 337 personas presuntamente pertenecientes a la estructura de mando de las organizaciones criminales, lo que ha "dañado la cúpula de poder" de esos grupos narcotraficantes.
El cartel de las drogas más golpeado ha sido el del Golfo-Zetas con 146 detenciones, seguido del de Sinaloa (93), los Arellano Félix (Tijuana, 40), Juárez (14) y La Familia (17).
Adicionalmente, las fuerzas federales capturaron a 27 presuntos miembros del cartel del norte del Valle de Colombia.
De otra parte, la SSP detalló que durante el Gobierno de Calderón se han incautado 7.118 armas (3.382 cortas y 3.736 largas) y 906.295 cartuchos, "cantidad que serviría para abastecer cada arma con 127 unidades".
A ello se suman 989 granadas, y los decomisos de un total de 235,3 millones de dólares en efectivo, 41,6 millones de pesos mexicanos (unos 3,1 millones de dólares), y 7.912 vehículos en posesión de presuntos delincuentes.
La SSP manifestó que la actual Administración federal ha capturado a 628 presuntos secuestradores, desmantelado 83 bandas dedicadas a ese delito, y mediante "el esquema de manejo de crisis o negociación" ha liberado a 463 personas raptadas.
"Las detenciones de los líderes de las organizaciones criminales, por parte del Gobierno Federal, ha generado una disputa por territorios entre las organizaciones delictivas", sostuvo la dependencia.
Sin embargo, advirtió de que "para que una organización criminal pueda operar en una 'plaza (ciudad) o región' es indispensable que cuente con la complicidad de las autoridades y cobijo social".