Ha trascendido un presunto caso de coacciones entre trabajadores del hospital Clínico de Valencia. Una anestesista ha grabado cómo la jefa de servicio la amenazaba para que renunciara a un puesto en la bolsa de trabajo, que -al parecer- estaba asignado de antemano. Le exigen que renuncie a la plaza que ella acababa de ganar por méritos.