Condenado un exdirector de sucursal de Caixa d'Enginyers a devolver cinco millones que robó a clientes

EUROPA PRESS 26/09/2012 13:12

La sección décima de la Audiencia también le condena a la pena de dos años de prisión, que deberá cumplir internado en un centro médico para que se trate de la esquizofrenia residual con síntomas psicóticos, que se le diagnosticó en 2002, y una multa de 1.440 euros.

A su exesposa, Elisabeth V.F., la condenan a dos años de prisión y una multa de 1,6 millones de euros por colaborar en el blanqueo y la ocultación de parte del dinero obtenido colocándolo en el extranjero o a nombre de testaferros y sociedades extranjeras.

La sentencia considera probado que Jordi B.M. entre 1999 y 2002 se apropió de fondos depositados por sus clientes para engrosar su patrimonio personal valiéndose de su condición de director de oficina y tras haberse ganado la confianza de clientes ancianos y con problemas de salud, "y además todos ellos con escasos conocimientos financieros".

Para quedarse con el dinero de los clientes considerados VIP, el director de sucursal cobraba en ventanilla cheques en los que les falsificaba la firma o les hacía firmar documentos para justificar estos trasvases de dinero "que los clientes, dada la confianza en él depositada, firmaron sin dudar".

Además, efectuaba ingresos provisionales en las cuentas que luego retiraba para que los clientes no sospecharan y elaboraba extractos bancarios que no correspondían con la realidad.

MANIPULÓ CUENTAS

El condenado, que manipuló las cuentas de ocho clientes, "confeccionó documentos inveraces que firmaba en calidad de director, ofreciendo garantías inexistentes sobre el capital o rentabilidades de productos financieros para conseguir mayores fondos", dado que una parte de su retribución salarial era variable y aumentaba según el volumen de negocio de su oficina.

Así, se quedó con parte de su patrimonio "bien detrayendo el dinero directamente de sus cuentas o en su defecto convenciéndoles para que invirtiesen en determinados productos bancarios o mantuviesen la inversión por estar garantizados".

El tribunal considera a Jordi B.M. --que se enfrentaba a una petición de seis años de prisión y que admitió los hechos en el juicio-- responsable de un delito de falsedad en documento mercantil en concurso medial con otro delito continuado de apropiación indebida.

La Audiencia ha absuelto a la que fue su secretaria en la entidad y prometida, Mireia L.G., de colaborar con él para depositar parte del dinero robado en un banco de Mónaco ya que no se ha probado que conociera las maniobras fraudulentas.