La huelga de controladores franceses obliga a cancelar numerosos vuelos

AGENCIA EFE 21/07/2010 09:00

"Se cumplen las previsiones en los dos grandes aeropuertos de París", declaró a Efe un portavoz de la Dirección General de la Aviación Civil (DGAC), que incidió en que la protesta está transcurriendo sin incidentes, manifestaciones relevantes o acciones de piquetes.

El aeropuerto parisino de Orly, recordó, es el más afectado con un 50 por ciento de los vuelos cancelados, mientras que en el de Roissy Charles de Gaulle, el de mayor actividad del país, el porcentaje de cancelaciones es de algo menor al 20 por ciento.

En Niza -tercer aeropuerto francés por tráfico- se suprimieron alrededor del 10 por ciento de los vuelos, sobre todo los que unen la capital de la Costa Azul con París.

El portavoz precisó que siguen cerrados al tráfico aéreo los aeropuertos de ciudades más pequeñas como Biarritz, Pau, Brest, Dinard y Metz-Nancy.

Sin embargo, ya han reiniciado sus operaciones los de La Rochelle y Bergerac, cerrados durante la mañana, así como el de Lille-Lesquin, que ya reabrió desde media mañana.

Todos estos aeródromos están al margen de los servicios mínimos que la Aviación Civil garantiza para las diez mayores plataformas aeroportuarias del país.

En términos generales, el balance es conforme a las previsiones y la gestión está siendo bastante fluida, según el portavoz de la DGAC, que añadió que se espera que el "retorno a la normalidad" se produzca a partir de primera hora de mañana, jueves.

Es posible que algunos de los vuelos previstos para mañana, sobre todo los de llegada a aeropuertos franceses, sufran todavía algún retraso debido a esta nueva protesta de los controladores en contra de la reorganización del espacio aéreo europeo.

No se ha registrado en ningún momento caos ni ha habido protestas significativas de los pasajeros afectados que, en esta ocasión, han seguido las recomendaciones de las autoridades.

Enn la mayoría de los casos, los viajeros ni tan siquiera se desplazaron a los aeropuertos tras haber constatado previamente con sus respectivas compañías que sus vuelos estaban cancelados.

Por lo que se refiere al nivel de seguimiento, la DGAC estima que un 30 por ciento de los controladores franceses están secundando el paro y un 10 por ciento del conjunto del personal de Aviación Civil, un resultado muy similar al de las huelgas realizadas en enero y febrero.

Los organizadores hacen, sin embargo, un balance bastante más optimista y califican de "fuerte" la movilización.

Advierten además de que, si la situación no cambia, convocarán otra protesta similar para el mes de septiembre.

Se trata de la tercera huelga en lo que va de año de los controladores aéreos franceses en contra de la reorganización del espacio aéreo para su unificación en la Unión Europea (UE).

La razón del paro, convocado por sindicatos minoritarios -que en conjunto reivindican la mitad de la representación-, es denunciar la reestructuración del espacio aéreo europeo para la unificación en varios bloques que integrarían a un grupo de países, cuando hasta ahora la competencia es de cada Estado.

Los sindicatos convocantes temen, en particular, que los 4.400 controladores franceses y buena parte de los otros 8.000 empleados de la DGAC pierdan su estatuto de funcionarios al ser absorbidos por una estructura junto a sus colegas de Alemania, Suiza, Bélgica, Holanda y Luxemburgo en FABEC (Fonctional Airspace Block Europe Central).