Nadie se podía creer lo que estaba sucediendo en la camilla de la consulta, lo que segundos antes era un problema de estreñimiento, momentos después se convirtió en una adorable recién nacida.
A Esther Hope, una asistente de salud de 23 años, varios médicos le habían diagnosticado con problemas intestinales severos y mandado laxantes para por curar su problema. Hope se quejaba de calambres abdominales y dolor de espalda.
Cuando los dolores se tornaron insoportables y acudió de nuevo al hospital, lo único que le dijeron es que todo era normal debido a los laxantes y los dolores eran debidos a que su cuerpo se estaba preparando para evacuar.
Durante varios segundos dejaron a Hope sola en la camilla donde la habían auscultado y de repente estaba dando a luz a la pequeña Lily, según afirma el diario Mirror.
Lily ahora es una niña sana de tres meses y su familia aún no puede creer lo milagrosa que fue su llegada.