Los hechos se produjeron poco antes de las 5.00 horas de este miércoles, cuando una patrulla del 092 que se encontraba en la calle Pizarro escuchó el ruido de un coche derrapando, y se topó con un Volkswagen Polo que venía de la calle Venezuela, y tomaba Pizarro en dirección a la Travesia de Vigo a gran velocidad.
Los agentes iniciaron la persecución del turismo, cuyo conductor aceleró la marcha y emprendió la huida, saltándose varios semáforos en rojo. Tras pasar por Urzáiz, el coche se empotró contra un semáforo en Gregorio Espino, pero reanudó la marcha a menos velocidad.
La dotación policial logró interceptarlo y, al identificar al conductor, los agentes se percataron de que tenía síntomas de estar bajo la influencia de bebidas alcohólicas.
Tras realizarle una primera prueba de alcoholemia, que dio resultado positivo (por encima del límite penal), los agentes informaron al conductor de que debería someterse a un segundo test, ante lo que el conductor se negó e intentó huir del lugar.
Los agentes redujeron al joven, que forcejeó con ellos, y procedieron a su detención y traslado a sede policial. El joven no dejó de revolverse y dar patadas mientras iba en el vehículo patrulla.