Según la información difundida por la Subdelegación del Gobierno y recogida por Europa Press, fue una mujer la que llamó al 091 para denunciar que dos jóvenes la estaban vejando y molestando en un supermercado y la que indicó a los agentes, a su llegada, dónde se había escondido uno de los sujetos.
Los policías encontraron al joven, quien comenzó a increparles con amenazas de muerte y posteriormente propinó puñetazos y patadas a los agentes; llegó incluso a morder a uno de ellos en una pierna, lo que le causó heridas por las que tuvo que acudir a urgencias y recibir tratamiento.