Drones, cebos y cámaras tanto de vigilancia como termográficas se incorporan a la búsqueda del reptil supuestamente avistado en Simancas (Valladolid), en la zona de Pesqueruela, donde confluyen los ríos Duero y Pisuerga.
Los rastreadores profesionales han negado la compatibilidad de los vestigios encontrados con la presencia de este tipo de animal. No obstante, tampoco la descartan del todo.
La Guardia Civil pretende agotar la búsqueda hasta poder descartar con el mayor porcentaje de fiabilidad la existencia de un reptil de gran tamaño en la ribera de Simancas.
Con esta finalidad se ha procedido a la colocación de varios cebos, así como de cámaras de vigilancia que se mantendrán, al menos, un par de días. Además, se revisarán los márgenes del río con cámaras termográficas y con la ayuda de un dron.
El río Pisuerga a su paso por Valladolid se está convirtiendo en noticias por más razones, no solo por el famoso reptil. Ayer un joven de 36 años despareció en el agua, a unos 12 kilómetros de donde fue visto el animal, cuando intentaba cruzar de orilla. Según los testigos, el hombre iba bebido.