Edwin, el depredador: historial demencial del violador de la menor de 13 años

  • Esta es la tercera denuncia por agresión sexual a la que se enfrenta

  • Pasó seis años en prisión por este motivo

  • El joven ha reincidido una y otra vez

Un viejo conocido de la Policía, la reincidencia de Edwin Enrique Granda siempre entró entre las posibilidades cuando salió de la cárcel en octubre de 2015. Por ello, los agentes sospecharon desde el primer momento tras la denuncia por violación de una joven de 13 años y, este martes 2 de julio, ha vuelto a entrar en prisión.

El pasado 24 de junio, durante la fiesta de San Juan, Edwin Enrique siguió a la menor por la calle y la abordó cuando entraba en su casa. Una vez dentro del edificio, la sujetó por la espalda, le tapó la boca, la obligó a subir al primer piso y la terminó penetrando en el rellano.

Un modus operandi que ya repitió en el año 2009, cuando atacó a una chica durante las fiestas de Girona. Entonces, según la sentencia de la Audiencia Nacional, siguió a la joven cuando se dirigía a su vivienda. A la altura del conocido como parque de los Teletubbies, la abordó por la espalda, le tapo con una mano y la amenazó con matarla si no accedía a sus deseos.

“El acusado la arrastró junto a un vehículo estacionado en las inmediaciones y le bajó los pantalones”, asegura la sentencia en la que se especifica que la joven forcejeó en todo momento, Finalmente, la colocó en el capó del turismo y la violó. Además, Edwin le dijo que no contara a nadie lo sucedido porque sabía dónde vivía y la mataría.

Unos hechos por los que pasó seis años en prisión que no le sirvieron para nada. A su salida de la cárcel, Edwin volvió a reincidir. Lo hizo durante la madrugada del 12 de diciembre de 2016, cuando en plena vía y valiéndose de la oscuridad, obligó a una joven a practicarle una felación. De esta, en cambio, se libró, ya que la jueza decretó su libertad después de declarar, ya que no existían suficientes pruebas como para inculparlo.

Reincide una y otra vez

Edwin cuenta con un largo historial anterior a los hechos del pasado 24 de junio. Como él, muchos son los violadores que salen de prisión sin conseguir rehabilitarse. En concreto, entre un 10 y un 20 por ciento de los agresores sexuales vuelven a reincidir tras salir de prisión. Son minoría, pero generan gran alarma social.

Junto a sus reincidencias, vuelve una y otra vez la polémica en torno a la castración química. Un sistema, con muchos detractores, que logra controlar el líbido de los violadores al reducir los niveles de testosteronas en los hombres. Países como Estados Unidos, Rusia o Perú lo tienen en vigor. Polonia fue el primer país de la Unión Europea en aprobarla para violadores de menores de 15 años en 2009.

En España, los agresores sexuales se enfrentan a penas de entre 6 y 12 años si incurren en violencia, intimidación o actuación en grupo. A esto hay que añadir diversos agravantes que pueden hacerles pasar hasta 15 años entre rejas. Todo para que cuando salgan a la calle, no vuelvan a reincidir.