En total, el Gobierno destinará 24,5 millones de euros para actuar en las nueve demarcaciones intercomunitarias, es decir en las cuencas del Júcar, del Miño-Sil, del Cantábrico, del Tajo, del Guadiana, del Ebro, del Guadalquivir, del Duero y del Segura.
Las obras irán destinadas a reparar los cuantiosos daños producidos por el temporal en el dominio público hidráulico, como desbordamientos de canales, inundaciones de áreas agrícolas o daños en infraestructuras de zonas regables y en presas, la restauración de los cauces y la mejora de la capacidad de desagüe de los ríos.
En la cuenca del Guadalquivir destacan las obras de mejora de la capacidad hidráulica y estabilización de los cauces de los ríos Castril (Granada), Genil (Sevilla) y Guadalquivir-Aguascebas (Jaén).
Además, se procederá a la rehabilitación del dique de la Balsa de la Verduga (Córdoba), la recuperación de la capacidad hidráulica del río Corbones aguas abajo de la presa de Cazalla (Sevilla), y los trabajos destinados a incrementar la seguridad de varios núcleos frente a las avenidas del río Genil.
También en esta cuenca cabe mencionar las actuaciones de reparación de los daños en las defensas de Andújar y su entorno, así como los de adecuación de los elementos reguladores de escorrentías de pluviales de la zona del Sotillo y del arroyo Molinos (Jaén).