El hombre que se quemó a lo bonzo en Almería estaba en busca y captura por quebrantar una orden de alejamiento

EUROPA PRESS 02/09/2011 14:02

El varón de 47 años de edad de origen búlgaro identificado como M.G. que falleció este jueves tras rociar su cuerpo con gasolina y prenderse fuego a lo bonzo en el paraje de La Molineta de la capital almeriense estaba en búsqueda y captura por parte de la policía, ya que había quebrantado una orden de alejamiento tras ser condenado por un caso de violencia de género.

Fuentes del Gobierno andaluz han concretado a Europa Press que el hombre había sido condenado a seis meses de prisión por un delito de malos tratos hacía su pareja sentimental, sentido en el que también se le interpuso una orden de alejamiento de dos años en los que tenía prohibido cualquier tipo de contacto con la víctima.

No obstante, tras haber cumplido condena en el centro penitenciario, acudió la semana pasada al domicilio donde residía su víctima con la intención de agredirla, de manera que llegó a tener un encuentro con ésta, quien pudo escapar de su agresor y alertar de su situación. Ante esto, la mujer acudió Centro de Atención Inmediata de la Diputación Provincial de Almería que activó el dispositivo de protección de las víctimas de violencia de género.

De esta manera, el hombre llevaba varios días en paradero desconocido mientras era buscado por la policía para practicar su detención, por lo que en un principio fue reconocido como un indigente de la zona que acudía a los inmuebles abandonados del paraje de La Molineta para pasar algunas noches.

Así, a las 9,55 horas de este jueves el hombre decidió acabar con su vida y se prendió fuego. Fuentes de la investigación han precisado a Europa Press que a la llegada de los Bomberos de la capital, el cuerpo del hombre ya se encontraba carbonizado en posición de cúbito supino, de forma que los efectivos sólo pudieron trabajar en el incendio que se había propagado a 25 metros del cadáver y que ha afectado a matorral.

Hasta el lugar se desplazaron varios vehículos de Policía Nacional, junto con Bomberos de Almería y efectivos sanitarios que únicamente pudieron certificar la muerte del hombre, cuyo cadáver fue conducido al Instituto de Medicina Legal (IML) para que se practique la autopsia dos horas después. Agentes de la Policía Científica y del Grupo de Homicidios, así como de la Unidad de Delitos Especiales y Violentos.