Una madre de 39 años y su hija de 14 fueron presuntamente asesinadas el pasado 3 de mayo en la delegación de Iztapalapa, en México, a manos de tres menores que 'jugaban' a los sicarios. Se desconocen los motivos que les llevaron a cometer el crimen.
Los adolescentes, de 17, 16 y 13 años, planearon el crimen, dibujando los planos de la vivienda y esperando a que las dos víctimas se encontraran en casa. Al parecer, las atacaron con objetos punzocortantes de la cocina.
El diario mexicano El Universal relata cómo el mayor de los presuntos agresores era vecino de las víctimas y animó a los otros dos, hermanos, a cometer el crimen.
Según las primeras informaciones, fue el padre de la familia quien encontró a las mujeres, todavía con vida, y alertó a la policía y a los servicios médicos. La madre murió antes de poder ser auxiliada y la hija falleció poco después en el hospital.
Un vecino del lugar afirma que vio a uno de los atacantes con la ropa manchada de rojo y que, tras preguntarle, éste respondió que se había manchado con pintura haciendo un proyecto escolar.