Además, han señalado que, de acuerdo con los resultados de una encuesta realizada por Ipsos en siete países europeos (entre los que se encuentra España), el 86 por ciento de los consumidores prefieren el uso de este tipo de bolsas a las de otros materiales y el 96 por ciento cree que se le debería dar mayor uso también en el embalaje de otros productos.
Por ello, la campaña ha diseñado unas pegatinas para los escaparates o puertas de los comercios, de modo que se informe al consumidor de que se trata de un "comercio responsable con el medio ambiente", según reza la pegatina, y de que recibirá sus compras en una bolsa de este tipo, según han explicado.
Los organizadores de la campaña esperan que alrededor de 75.000 comercios se sumen a la iniciativa en su primera fase. De hecho, aseguran que el 65 por ciento de los establecimientos españoles ya utilizan estas bolsas.
Por otra parte, han indicado que, de las 2.050 millones de bolsas de papel que se utilizan anualmente en el país, el 74 por ciento se reciclan, según los datos de 2012. Además, "si una bolsa de papel no llegase a entrar en el circuito del reciclado, se biodegradaría en un periodo de entre dos y cinco meses", han añadido.
Por ello, la utilización de este tipo de embalaje en lugar de otros que utilizan plástico supuso en 2012 una reducción de emisiones de CO2 a la atmósfera de cerca de 78.000 toneladas, según han asegurado, "que correspondería a la emisión anual de 46.000 hogares en agua caliente y calefacción".