En declaraciones a EFE, el meteorólogo de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) Ángel Alcázar ha explicado que la situación será de gran "inestabilidad" por la llegada de dos borrascas consecutivas.
Una primera borrasca atlántica entrará el viernes por el suroeste y dejará tormentas moderadas y descenso de temperaturas a su paso por Andalucía, Extremadura y la meseta Sur, donde las precipitaciones vendrán acompañadas de fuertes rachas de viento que se harán notar especialmente en el Estrecho y en Ceuta.
El sábado seguirá la situación de inestabilidad generalizada, aunque será la comunidad gallega la más afectada con tormentas localmente fuertes en forma de granizo.
En la comunidad de Madrid, las fiestas se disfrutarán con "el cielo cubierto y un descenso de las temperaturas máximas", ha advertido el meteorólogo.
Para Alcázar, "el principal problema es que los suelos están ya muy saturados con las precipitaciones caídas en Semana Santa y se puede acumular bastante agua en superficie, lo que puede provocar dificultad en algunas vías".
En las Islas Baleares se producirán precipitaciones abundantes debido a la formación de una borrasca mediterránea, y en las Islas Canarias se generará una nueva borrasca el domingo día 1 que entrará en la península por el suroeste.
Esta nueva borrasca afectará al sur de la península y se mantendrá en forma de chubascos localmente fuertes en todo el área mediterránea.
El norte de España, especialmente Asturias y Cantabria, volverá a librarse de las precipitaciones, ya que "la zona menos afectada será la cornisa cantábrica, que sólo sufrirá un descenso ligero de las temperaturas", ha afirmado el meteorólogo de la AEMET.