Las fuentes explicaron a Efe que los secuestradores son miembros de la tribu de Al Faray y que llevaron a los capturados de un barrio en el sur de Saná a la zona montañosa de Bani Debiyán, 80 kilómetros al este de la capital.
Se desconoce si los secuestrados son turistas o residentes en Yemen. También hay datos confusos porque otras fuentes de los servicios de seguridad creen que los secuestrados son cuatro, y no dos, aunque estas versiones no han sido confirmadas oficialmente.
Fuentes de la embajada italiana en la capital yemení dijeron a Efe que todavía están confirmando si los capturados son italianos.
A la misma zona de Bani Debiyán, miembros de otra tribu yemení llevaron en diciembre pasado a una cooperante alemana y a sus padres, que se encontraban en Yemen de vacaciones, después de secuestrarlos en la ciudad de Radaa, unos 130 kilómetros al suroeste de Saná.
Los alemanes fueron liberados más tarde después de que el Gobierno yemení prometiera a los captores considerar sus demandas.
El secuestro de extranjeros se ha vuelto común en Yemen. En la mayoría de los casos se producen para presionar a las autoridades a fin de que cumplan determinadas demandas presentadas por las comunidades tribales.