Durante el acto, que contó también con la presencia de la delegada del Gobierno en Canarias, María del Carmen Hernández Bento; el subdelegado del Gobierno en Las Palmas, Luis Molina; la directora general de Apoyo a Víctimas del Terrorismo del Ministerio del Interior, Sonia Ramos; y la presidenta de la Asociación Canaria de Víctimas del Terrorismo (Acavite), Lucía Jiménez; se ha hecho entrega de 18 Grandes Cruces y 31 Encomiendas.
En su intervención Aguilera ha destacado que la Real Orden de Reconocimiento Civil a las Víctimas del Terrorismo tiene como finalidad honrar a las víctimas, y lo viene haciendo desde su creación en 1999 por la Ley de Solidaridad con las víctimas del terrorismo.
Del mismo modo, ha subrayado que esta Ley no sólo pretendió otorgar su reconocimiento a quienes reunían dicha condición, sino asimismo "efectuar una expresa y solemne manifestación de homenaje por parte de los poderes públicos y de la sociedad al sacrificio de estas personas".
La Real Orden comprende en la actualidad tres grados. Se otorga con el Grado de Gran Cruz, a título póstumo, a los fallecidos en actos terroristas; con el grado de Encomienda para heridos y secuestrados en actos terroristas; y con el grado de Insignia para los amenazados, los ilesos en actos terroristas, y los familiares, hasta el segundo grado de consanguinidad, de fallecidos y de heridos con lesiones incapacitantes derivadas también de la acción terrorista.
ESPECIAL MENCIÓN A LAS FUERZAS Y CUERPOS DE SEGURIDAD DEL ESTADO
Por su parte, el subsecretario ha hecho una mención especial a los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado condecorados este viernes por su importante labor en la lucha contra el terrorismo.
Aquí, hizo especial hincapié en que "el compromiso que nos une en este acto no es más que el necesario y debido reconocimiento público y social a las víctimas del terrorismo, dando respuesta con ello a los principios de memoria, dignidad, justicia y verdad, que son los principios inspiradores de nuestro sistema integral de apoyo a las víctimas".
También ha señalado también que se trata de un reconocimiento que "debe promocionarse y desarrollarse fundamentalmente desde y por los poderes públicos, pero también por toda la sociedad".
"LAS VÍCTIMAS RECLAMÁIS MEMORIA"
"Las víctimas reclamáis memoria, porque ello significa justicia para todos los que han sufrido directamente la violencia terrorista, y justicia también para toda una sociedad que defiende el estado de derecho y la convivencia pacífica", declaró.
Aguilera ha incidido en que "la memoria y el reconocimiento actúan como herramientas de deslegitimación del terror y como instrumentos de toma de conciencia de los efectos de la violencia terrorista; son, al fin y al cabo, armas de pedagogía democrática".
"Debemos proclamar y defender --continuó-- un consenso de reconocimiento y memoria frente al olvido, de valor frente a la negación, y de estado de derecho frente a la violencia terrorista".