Leonardo Sanchez estaba a punto de cumplir los dos años antes de que ocurriera la tragedia. El pequeño estaba jugando con sus compañeros de su guardería de Utah y decidió esconderse bajo un puff. Uno de los trabajadores del West Jordan Child Center , sin darse cuenta de la situación del niño, se sentó sobre el puf para comenzar a leerle cuentos al resto de niños.
Para cuando se dio cuenta y fue trasladado al hospital, Leonardo ya estaba en muerte cerebral por lo que posteriormente falleció.
Los padres, destrozados por la noticia, aún no pueden explicarse cómo pudo suceder. “Es difícil de entender. Mide como un metro. No es un niño pequeño para sus dos años” decía el padre de Leonardo para la revista ‘Time’. Sin embargo, la familia asegura que han perdonado al trabajador y no han presentado cargos. Por su parte, la Policía asegura que se ha abierto investigación al respecto, aunque el trabajador del centro no ha sido detenido.