Los médicos confirmaron que Kayleigh Brown no tenía ningún tipo de historial que confirmase que había consumido heroína anteriormente, tampoco evidencias en su cuerpo, a excepción de la noche en que esta droga le había matado.
Según afirma el diario Mirror, el cuerpo de la joven fue encontrado sin vida por su novia, quien confirmó a las autoridades que Kayleigh había probado la cocaína y el cannabis en la universidad, pero no lo probaba desde hacía mucho tiempo.
En el historial médico de la joven, destacaban problemas para dormir y por eso tomaba pastillas contra el insomnio.