Negligencia médica con un menor: Le dejan un ojo pegado cinco días

Informativos Telecinco 11/11/2016 08:27

La familia del pequeño Jay Watson le llevó a curarse una brecha en la frente al hospital. Una vez allí, cuando estaba siendo atendido por el personal médico, y tras curarle la herida se percataron que el pegamento que habían utilizado para unir la brecha había penetrado en uno de sus ojos.

La madre y la abuela de Jay, de cuatro años de edad, llevaron al menor al hospital Alexandra de Woodrow, de Redditch (Reino Unido), después de hacerse un corte en la cabeza en una zona de juego infantil.

El personal del hospital tomó la decisión de pegar el corte en lugar de darle puntos de sutura. Su familia afirma que vieron como mientras le curaban el pegamento le corría por la cara hacia el ojo. En ese momento, Jay gritó de dolor pero el personal lo envió a casa explicándoles que el ojo pegado se abriría solo en unos días.

Pero tras la primera noche, en la que Jay no pudo conciliar el sueño y no paró de llorar de dolor, su familia le llevó a varios centros sanitarios buscando una rápida e indolora solución. Tras varios intentos en vano de abrirle el ojo, Jay represó a su domicilio. Finalmente, a los cinco días, y tras muchas lágrimas y gritos del menor, el ojo se abrió solo.

El niño, según relata la familia, vivió unos días de agonía: "Desde que salió fue como si hubiera estado en una zona de guerra", según recogen medios locales. "El estrés que el niño sufrió por intentar abrir el ojo sin éxito fue increíble. El hospital cometió, de manera clara, una negligencia", apuntan.

Un portavoz del servicio de salud británico reconoce que "preocupa que la experiencia de los pacientes no coincida con los altos estándares de calidad que establecemos y pide a la familia que contacte con ellos para tratar el caso individual de la mejor manera".