Francisco hizo estas consideraciones en un vídeo-mensaje que ha enviado a los participantes de un congreso Internacional que gira en torno a su exhortación "Amoris laetitia" y que ha sido organizado por la Pastoral Familiar de la Conferencia Episcopal Italiana.
Para el pontífice la familia genera unos fuertes vínculos que se traducen en un antídoto contra lo que ha descrito como un "individualismo" cada vez mas difundido en el mundo.
"El amor entre un hombre y una mujer es, evidentemente, una de las experiencias humanas más fértiles, es el fermento de una cultura del encuentro y lleva al mundo actual una inyección de sociabilidad", ha explicado.
Así, ha señalado que los comportamientos ególatras e individualistas se traducen en la práctica en actitudes en las que el hombre es "incapaz de mirar a los demás". "Esto tiene consecuencias gravísimas para todos los lazos que se crean en la vida", ha dicho.
Por ello, ha instado -tal y como ya indicó en "Amoris laetitia"- a no confundir "la primacía de la conciencia" de la que ha dicho que "siempre debe respetarse" con la "autonomía exclusiva del individuo respecto a las relaciones que vive".
Por último, ha invitado a los sacerdotes a acompañar pastoralmente a los católicos durante su vida matrimonial y paternal para no dejarles solos "en el empeño de aplicar el Evangelio en las situaciones concretas de la vida".