Benedicto XVI ha salido con algo de retraso, sobre las 19:25 horas, de Barajas (Madrid) rumbo al aeropuerto de Ciampino, en Roma, tras participar en la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), que concluye este domingo.
Tras una breve despedida oficial al Santo Padre en el aeropuerto madrileño, en un acto que ha contado con la presencia de los Reyes don Juan Carlos y doña Sofía, y cerca de 2.000 invitados, Benedicto XVI ha subido al avión en medio de los vítores de cientos de miles de peregrinos y escoltado de nuevo por la joven Guardia Suiza. En ese momento, la Banda de la Guardia Real ha interpretado la marcha del Viejo Almirante, mientras el Santo Padre saludaba a los peregrinos.
Así, el Pontífice ha tomado un vuelo especial de Iberia, que tiene programada su llegada al aeropuerto de Ciampino a las 21.00 horas. El A321 de la constructora Airbus lleva por nombre 'Villa de Uncastillo' y en este mismo avión ya voló el Pontífice en julio de 2006, tras su primera visita a España, con motivo del 'Encuentro Mundial de las Familias' celebrado en Valencia.
"ESTA ES LA JUVENTUD DEL PAPA"
Cientos de personas han acompañado a Benedicto XVI en su subida al avión aguantando el calor que ha sido protagonista de la JMJ. Entre los peregrinos reina una sensación "muy positiva" por haber contado con la presencia del Papa y, sobre todo por "sus mensajes".
Desde más de una hora antes han estado cantando las consignas de todos estos días: 'Esta es la juventud del Papa', 'Benedicto, Benedicto' y, cuando ha llegado le han gritado varios vivas, 'se nota, se siente, el Papa está presente', 'que boten los cristianos' y 'Vuelve pronto Santo Padre'. También le han cantado 'Algo se muere en el alma cuando un amigo se va' y 'Adiós con el corazón'.
Concretamente, Mercedes, de Madrid, dice que ahora se siente "más joven" y que los mensajes del Papa le han servido de "gran ayuda", al tiempo que le ha parecido "muy emocionante" verle llegar". De estos días se queda con el Via Crucis que le pareció un momento "fascinante" y ha añadido que, aunque no pudo ir a Cuatro Vientos ha sentido todos los instantes de una forma especial. "Sobre todo deseo que este viaje del Santo Padre haya dejado alguna raíz, para que salga algo bueno de la sociedad y mejoren las cosas", ha señalado a Europa Press.
Mientras, Antonio, un británico que lleva 22 años viviendo en España ha valorado lo "impresionante de ver a tanta juventud sin armar ningún follón, disfrutando y dejando las cosas como estaban antes" y le ha alegrado verles "tan contentos". Asimismo ha subrayado el "fenomenal mensaje que ha dejado que como siempre ha explicado muy bien". Sin embargo, opina que faltará mucho esfuerzo para que este espíritu no desaparezca por lo que estima que las parroquias deberán hacer mucho trabajo para que esto sea "una educación contínua".
Igualmente, Fernando Fernández, de Colmenar Viejo, ha valorado la presencia y el mensaje de Benedicto XVI, así como los silencios que se han producido en muchos momentos en estos cuatro días. A su juicio, "lo mejor" de esta visita pastoral es la unidad vivida en la diversidad, la amistad, la camaradería. "He visto al Papa le he visto muy trabajador por la vida y volcado en su mensjae y conocedor de lo que tiene que hacer para que todos los que tenemos fe empujarnos a vivirla día a día. De cara al futuro deseo que esto cale en muchas personas y se pueda extender a más personas y a todas las que han participado de una manera o de otra. Ese es el mensaje que ha querido transmitir en la misa de esta mañana", ha concluido.
COMIDA Y MÚSICA
En este vuelo especial se han cuidado detalles como el escudo papal en el fuselaje del avión, lencería de mesa bordada con el emblema del Vaticano y la leyenda 'JMJ 2011 Madrid', y una vajilla de la firma Vista Alegre diseñada 'ex profeso' para este vuelo.
En cuanto al menú, Benedicto XVI podrá elegir entre una selección de platos españoles, como crema fría de tomate con jamón ibérico y huevo de codorniz, lomo de cordero lechal al horno con canela y melocotón, o un plato de quesos españoles con dulce de membrillo, piñones y mermelada de higo.
Incluso el hilo musical ha sido elegido para la ocasión, con clásicos españoles, como Joaquín Rodrigo, Granados y Albéniz, entre otros; y también uno de los compositores preferidos de Benedicto XVI, Mozart.
Asimismo, se podrá escuchar a bordo una grabación en directo de los años sesenta, cedida por Radio Nacional de España (RNE), en la que se recogen las voces de los niños del coro de la Catedral de Ratisbona, dirigido durante 30 años por George Ratzinger, hermano del Papa.
En este vuelo viajarán la comitiva del Papa, así como el presidente de Iberia, Antonio Vázquez, y el consejero delegado de la compañía, Rafael Sánchez-Lozano.