"Desgraciadamente la historia, también la reciente, está jalonada de tiranías, de ideologías que han impuesto y oprimido, que no buscaban el bien del ser humano, sino el poder, el éxito, el beneficio", ha subrayado, al tiempo que ha asegurado que "los diez mandamientos no son una limitación, sino una indicación para la libertad".
Además, este mensaje del Papa Francisco se proyectará en los próximos meses en las plazas de Bari, Génova, Cagliari, Florencia, Palermo, Bolonia y Turín.
"Los Diez Mandamientos son un don de Dios", ha destacado Francisco, que también ha explicado que "la palabra mandamiento no está de moda" porque "al hombre de hoy le suena como algo negativo, como la voluntad de alguien que impone límites".
Sin embargo, el Papa ha subrayado que "los diez mandamientos proceden de un Dios que ha creado por amor, de un Dios que ha establecido una alianza con la humanidad" por lo que ha invitado a tener "confianza en Dios" y a seguir los diez mandamientos como "un código ético para la construcción de una sociedad justa a la medida de la persona".
En esta línea, el Pontífice ha insistido en que los diez mandamientos enseñan a "evitar la esclavitud" a la que reducen tantos ídolos construidos, a "abrirse a una dimensión más amplia de la material, a vivir el respeto por las personas, a ser sinceros y honrados en las relaciones, a custodiar toda la creación y a nutrir al planeta con ideales elevados, nobles y espirituales".
"Seguir los diez mandamientos significa ser fieles a nosotros mismos, a nuestra naturaleza más auténtica y caminar hacia la libertad verdadera que Cristo nos enseñó en las Bienaventuranzas", ha concluido.