El Papa lavará mañana los pies a doce refugiados

EUROPA PRESS 23/03/2016 09:58

Francisco es hijo de inmigrantes italianos y su primer destino como pontífice dentro de Italia fue la isla de Lampedusa en julio de 2013, donde exclamó "Vergüenza" contra cultura que es indiferente ante el drama de los miles de inmigrantes que mueren ahogados en el mar Mediterráneo al intentar alcanzar las costas de Europa.

Este será uno de los actos que presidirá durante las celebraciones de su cuarta Semana Santa al frente de la Iglesia católica en Roma, que inició la pasada semana los preparativos para acoger a miles de peregrinos que celebrarán en la capital italiana vivir la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesús.

Además, será la primera vez que lave los pies después de que cambiara las leyes de este rito para que pudieran acceder las mujeres. A finales de enero, la Congregación del Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos cambió las reglas de selección para el rito de lavar los pies ligado tradicionalmente al Jueves Santo para que se incluyera a las mujeres, en virtud de la facultad concedida por el papa Francisco, de manera que el grupo elegido "represente la unidad del Pueblo de Dios".

No obstante, el Pontífice ya se había adelantado al cambio de normativa en 2013, en su primera celebración de Semana Santa como Papa, cuando lavó los pies a doce jóvenes presos de nacionalidades y confesiones distintas. Entre ellos, había dos mujeres, una italiana católica y una de Serbia, musulmana.

JESÚS TAMBIÉN SUFRIÓ LA INDIFERENCIA

El próximo 20 de marzo comenzó oficialmente la Semana Santa con el Domingo de Ramos. Francisco bendijo los ramos de olivo y las palmas de los peregrinos en la Plaza de San Pedro a las 9.30 horas de la mañana. Después, continuó con la misa y el ángelus, en el que saludó a los jóvenes presentes con ocasión de la de la 31 Jornada Mundial de la Juventud.

Precisamente, dada la inminencia de la puesta en marcha del acuerdo UE-Turquía para repatriar a los refugiados que han llegado a los puntos calientes europeos, el Papa aprovechó esta primera misa de Semana Santa para arremeter contra los indiferentes que no quieren "asumir la responsabilidad" del destino de estos refugiados al explicar que también Jesús "experimenta en su propia piel también la indiferencia".

"Tantos marginados, tantos refugiados... Tantos que no quieren asumir la responsabilidad de su destino", lamentó el Pontífice en la ceremonia que conmemora la entrada de Jesús en Jerusalén. "Jesús, también experimenta en su propia piel también la indiferencia pues nadie quiere asumir la responsabilidad de su destino", agregó.

El jueves 24 de marzo, el Papa presidirá la Misa Crismal a las 9.30 horas de la mañana en la Basílica de San Pedro, a la que asistirán sacerdotes, cardenales y obispos de toda Italia. Como es habitual, el Pontífice argentino bendecirá los óleos que se utilizarán en la administración de los principales sacramentos durante el año.

Ese día por la tarde, el Obispo de Roma presidirá la Misa Vespertina de la Cena del Señor, en la que se recuerda la última cena de Jesús. Será también el jueves cuando el Papa lavará los pies a los doce refugiados. Además de los internos de la prisión de menores Casal del Marmo, a los que el Papa lavó los pies en 2013, en 2014, lo hizo con personas con discapacidad del Centro Santa María de la Providencia de Roma, y en 2015 a reclusos de cárcel de Rebibbia.

El 25 de marzo, Francisco estará presente en la celebración de la Pasión del Señor prevista a las 17:00 horas en la Basílica Vaticana, mientras que por la noche acudirá al Coliseo de Roma para presidir el vía crucis, las catorce estaciones que recorren desde la condena a muerte de Jesús hasta su sepultura que tendrá lugar a partir de las 21.15 horas.

El sábado santo, Francisco entrará en procesión a la basílica de San Pedro a oscuras portando el cirio Pascual para celebrar la Vigilia Pascual y, finalmente, el 27 de marzo, Domingo de Resurrección, Francisco presidirá la misa en la Plaza de San Pedro a las 10:15 horas, tras la cual dará al mundo entero la bendición 'Urbi et Orbi' al mediodía.