En la misiva Francisco ha hecho un llamamiento "para que se ponga fin a la violencia" y para que se resuelvan "las hostilidades de forma pacífica".
Asimismo, ha pedido que se condenen "todas las formas de extremismo y de terrorismo con independencia de su signo". En otra parte de la carta, el Papa ha pedido que se garantice que "la ley humanitaria internacional sea plenamente respetada y que se garantice la protección a los civiles y el acceso a la ayuda humanitaria".
De esta manera, el pontífice ha mostrado "un signo de particular afecto hacia el pueblo sirio, sometido a duras pruebas en los últimos años".