El robot Curiosity encuentra pruebas de que hace más de tres millones de años existió un antiguo lago en Marte que pudo albergar vida microbiana. El análisis se ha realizado en el cráter Gale. No es la primera vez que se encuentran evidencias de agua en el planeta rojo, en otros estudios se han podido ver rocas talladas por corrientes de agua como ríos.
Gracias al sistema de perforación de Curiosity, los científicos han podido analizar las muestras recogidas por el robot. Se cree que el lago era de agua dulce porque contenía elementos como: carbono, hidrógeno, oxígeno, nitrógeno, sulfuro y fósforo; que son claves para la vida microbiana.
También se han realizado estudios acerca de la radiación, que permiten saber las posibilidades de sobrevivir en Marte y el riesgo que correrían los astronautas que viajasen ahí.
Los científicos desarrollan nuevas estrategias para averiguar si alguna vez ha habido vida en el planeta vecino.