Los hechos tuvieron lugar en la carretera NA-160 Tudela-Fitero el 31 de enero de 2010, cuando el acusado circulaba a "una velocidad inadecuada para las condiciones de la vía, razón por la que se salió de su margen derecho, circulando por la cuneta hasta que chocó contra una obra de fábrica de hormigón de acceso a una finca", según la sentencia.
En el vehículo circulaba como pasajero un joven de 25 años, natural de Colombia y residente en Tarazona, que murió como consecuencia de las heridas sufridas. En el momento del accidente, el fallecido no utilizaba el cinturón de seguridad.
El juez condena al procesado por un delito de homicidio por imprudencia grave y le impone una indemnización de 58.121,86 euros para el padre de la víctima y de 2.451,31 euros para una tía. Además, el fallo sustituye la pena de cárcel por una multa de 5.760 euros. Contra la sentencia cabe recurso de apelación.