La Plataforma gallega en Defensa de Servicio Público de Prevención e Defensa Contra os Incendios Forestais ha anunciado una movilización el domingo 29 de septiembre, a las 12.00 horas, en Santiago para exigir a la Xunta un servicio "único, público y profesionalizado" de prevención y extinción que, además de apagar los incendios, realice una prevención en las zonas de "mayor riesgo" y "valor paisajístico".
También pide una ordenación del territorio que evite la despoblación del rural y la forestación de las tierras agrícolas para convertir estas zonas en una "fuente de empleo y riqueza". Asimismo, solicita una política forestal de verdad que eluda las especies pirófitas y potencie el papel de las comunidades de montes para impedir su privatización.
En la línea de la movilización, el colectivo llevará a cabo marchas en zonas asoladas por los incendios el 25, 26, 27, 28 y 29 de septiembre. La última comenzará en Milladoiro a las 10.00 horas y finalizará en Santiago el mismo día que se realizará la manifestación.
La plataforma ha lamentado en una rueda de prensa la "falta de diálogo" de la Xunta con los colectivos relacionados con la prevención y defensa de incendios así como con el monte y su explotación. Ante esto, ha presentado un escrito dirigido al presidente de la Xunta y al portavoz parlamentario del PPdeG, Pedro Puy, en el que exigen la creación de una mesa de "análisis" y "estudio" en la que se aborden todos los problemas enunciados anteriormente.
Este colectivo denuncia que 3.500 de los profesionales que trabajan directamente en la extinción de incendios tienen un contrato "temporal" y "precario", mientras la Policía autonómica podrá sancionar directamente a los incendiarios durante todo el año.
Con estas palabras, este colectivo ha salido al paso de las declaraciones realizadas este jueves tras el Consejo de Gobierno por el Presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, que anunció que las denuncias de la Policía autonómica contra los causantes de los fuegos supondrán sanción inmediata.
Y es que el contrato que tienen estos 3.500 trabajadores, ha remarcado María José Fuentes, de CC.OO., en rueda de prensa, dura entre nueve y tres meses, aunque puede ser "incluso menos si llueve". De este modo, de las 4.500 personas que, según defiende, trabajan en la extinción directa de fuegos --son 5.708 según recoge el Pladiga--, sólo 1.000 tienen un contrato de trabajo "estable" y "durante todo el año".
"MENOS BALONES FUERA"
En esta misma línea, Paulo Rubido, de la CIG, ha pedido a la Xunta que eche "menos balones fuera" ya que, aunque la mayor parte de los montes gallegos son privados y corresponde a las mancomunidades destinar parte de los ingresos de las talas a la prevención y limpieza, es el Gobierno gallego el que establece los impuestos y tributos sobre estos terrenos y, por tanto, tiene capacidad de actuar.
Así, Rubido ha subrayado que la Xunta puede cobrar más impuestos a aquellos propietarios que tienen el monte "abandonado" que a aquellos que lo tienen "cuidado". Tampoco es lo mismo tener plantadas especies con "menor potencialidad" a la hora de arder que "especies altamente pirófitas", ha recordado.
Por ello, esta plataforma sostiene que, aunque el propietario del monte es el "responsable directo", el Gobierno gallego sí tiene "mecanismos" para "obligar" a los dueños de los terrenos a limpiarlos.
PRÓRROGA DE LA CAMPAÑA
En cuanto a la disposición gradual de medios y a la prorrogación de la campaña contra incendios anunciada por la Xunta, Rubido ha asegurado que esto es "falso". Y es que el 30 de septiembre, ha destacado, 400 trabajadores adscritos al servicio de la Xunta verán cesados sus contratos, lo mismo que les ocurrirá entre el 5 y el 7 de octubre a 500 trabajadores de Seaga.
Las que sí continuarán serán las brigadas municipales ya que, al retrasarse el Gobierno gallego en la adjudicación de éstas a los ayuntamientos, tendrán que finalizar su contrato de tres meses, según ha indicado Rubido. "Por el hecho de empezar más tarde acaba más tarde, haya fuegos o no", ha remarcado este miembro de la CIG mientras apuntaba que podrían trabajar hasta noviembre por empezar algunas en agosto.