Varios de los más de mil profesores que se han reunido este viernes con el Papa Benedicto XVI en la Basílica de El Escorial han afirmado a Europa Press que su encuentro con el Pontífice ha sido el momento "más importante" de sus vidas" y que ha sido una experiencia "muy especial".
Así, el doctor en Historia y Vicerrector de la Universidad San Pablo CEU, Alejandro Rodríguez de la Peña, que ha sido el encargado de leer un discurso ante el Pontífice, ha comentado que ha estado varios meses dedicándose "exclusivamente" a este acto y que ha sido "mejor de lo que esperaba".
Por su parte, el doctor en Derecho de la Universidad Católica de Argentina Gabriel Maíno, único profesor argentino presente en el acto, ha manifestado que ha sido una experiencia "inolvidable e impagable" y lo "más importante de su vida junto al nacimiento de sus hijos". Igualmente, ha agregado que el Papa le ha transmitido "valentía y coraje". También ha afirmado que Benedicto XVI es una persona "cálida, humilde y sencilla".
Para Juan Carlos Domínguez, rector de la Universidad San Pablo CEU, "ha sido un discurso fantástico" y ha asegurado que este acto es la "culminación" de su vida universitaria. También ha destacado la idea del Papa de que "la universidad no es para educar profesionales, sino personas y que no se puede olvidar su dimensión trascendente".
Mientras, el ex ministro de Justicia y profesor de Derecho Administrativo en la Universidad Complutense José María Michavila, que también ha estado presente en la Basílica de El Escorial, ha resaltado el "hondo calado intelectual y moral" del discurso del Santo Padre. "A los profesores universitarios nos ha venido a pedir coherencia entre nuestro modo de pensar y de vivir, nos ha recordado que también se enseña con el ejemplo", ha comentado.
Igualmente, ha recordado que el Papa les ha transmitido que "razón y corazón no deben separarse y que caridad y conocimiento deben ir juntos". "Nos estimula a hacer de la docencia no solo una transmisión de conocimientos técnicos, sino de modelos de vida que lleven a la felicidad. Y esa felicidad solo se encuentra buscando la verdad", ha agregado.
EL PAPA HA BENDECIDO AL HIJO DE LUCÍA FIGAR
Por otro lado, la consejera de Educación de la Comunidad de Madrid, Lucía Figar, ha destacado que le ha dicho a Benedicto XVI que el Gobierno de esta región "defiende la vida y la familia", a lo que el Papa ha respondido que eso es "muy importante". En un tono más personal, Figar ha comentado que al hacerle saber al Papa que está embarazada, "él ha bendecido la criatura". La consejera también ha valorado la organización del acto como "muy original y acertada".
Figar, junto a la consejera de Presidencia, Regina Planiol, y al vicepresidente de la región, Ignacio González, han sido los tres miembros del gobierno regional madrileño que, con otros doce profesores, han saludado al Santo Padre en el besamanos en representación de la comunidad universitaria.
Por su parte, la secretaria de la provincia eclesiástica de Madrid y miembro del Consejo Escolar del Estado, Rosa María de la Cierva, ha manifestado que las palabras del Papa "estimulan a las universidades a difundir la fe entre los alumnos, a no tener miedo de dar testimonio de la fe".
Mientras tanto, el rector de la Universidad Católica de Murcia, José Luis Mendoza, también ha resaltado del mensaje del Papa que "no los profesores no sean solo formadores en el seno de la universidad, sino que sean estímulo y testimonio de vida para los alumnos". También ha destacado que Benedicto XVI ha puesto "la inteligencia y la humildad como fundamento de la vida universitaria".
"PRIVILEGIO AL ALCANCE DE MUY POCOS"
Por otro lado, tres monjas de la congregación religiosa católica Iesu Communio han asegurado que ver al Santo Padre "es un privilegio al alcance de muy pocos". Asimismo, han manifestado que ha sido "un acto muy importante que habrá merecido la pena si sirve para que un joven se convierta al catolicismo". Estas monjas han estado muy activas durante la ceremonia, ya que durante su celebración han estado aplaudiendo, bailando y cantando.
Por su parte, las hermanas de Medicina Inmaculada y Mari Carmen han señalado que ha sido un acto "muy vivo que demuestra que el cristianismo está aquí", al tiempo que han agregado que ha sido una llamada a la santidad. "Actos como la Jornada Mundial de la Juventud sirven para transmitir la verdadera imagen de los religiosos: viva y joven y con gente de todos los sitios. Esta es una Iglesia abierta", han asegurado.