Según ha informado el portal de noticias Infobae, la protagonista de la noticia fue consciente de que su pareja le había sido infiel mientras se encontraba utilizando el teléfono móvil de su novio el domingo 21 de enero de 2018. Fue entonces cuando descubrió conversaciones y fotografías íntimas que R. Suleimanov había mantenido con otra chica.
Nada más leer los mensajes personales y privados que había compartido su pareja con otra mujer Zhanna Nurzhanova planeó paso a paso su venganza. Esa misma tarde, la mujer le ofreció una noche de pasión a su novio y le propuso realizar varios juegos sexuales. Uno de ellos consistía en ser atado de piernas y manos con varias bufandas.
El medio de comunicación asegura que el hombre accedió encantado y cuando se encontraba totalmente inmóvil su novia "sacó dos pastillas, barbitúricos, y le obligó a tomarlas. A las 2 de la noche le quitó su ropa interior y lo acusó de haberle sido infiel. Golpeó su cabeza, su cara y su pecho con un palo de aluminio. Luego cogió tres ampollas de anestesia y una jeringa y se la inyectó alrededor de la ingle".
Después de haberle pinchado, Zhanna Nurzhanova se hizo con un bisturí y le cortó los dos testículos. Lo que ella no se esperaba es que este corte le provocaría a su hasta entonces novio una grave pérdida de sangre. Al ver las consecuencias que había tenido esta incisión la mujer decidió llevarlo al servicio de urgencias. Por suerte, los médicos consiguieron tratar a R. Suleimanov y reconstruir como pudieron la zona cortada.
Bulat Shalekenov, el director general de la Asociación de Salud Masculina de Kazajistán, concedió unas palabras al periódico inglés donde reveló las consecuencias que le quedarán al hombre tras este ataque. Según el médico, el paciente podrá "disfrutar del sexo" ya que "su pene todavía sigue en su lugar" aunque "no podrá tener hijos".
Además, este no será el único contratiempo que tendrá que hacer frente el hombre ya que según el doctor sufrirá varios cambios hormonales. Por su parte, Zhanna Nurzhanova fue detenida nada más llegar a los servicios médicos y ahora se enfrenta con una condena de cárcel que abarca hasta los diez años de prisión.