Aunque no está prohibido por ley, ir conduciendo mientras se lleva el abrigo puesto es peligroso. Cuando el conductor lleva tantas capas como si de una cebolla se tratase, es probable que el cinturón de seguridad no sea tan efectivo como debiera. Aunque se crea que esto aumenta la seguridad, realmente ocurre lo contrario: en caso de accidente, el cuerpo se desplazará unos centímetros que pueden suponer una gran diferencia, y las funciones de retención y del airbag pueden verse afectadas, tal y como informa el portal web de la empresa Mutua Madrileña.
En el caso de los niños, ocurre exactamente lo mismo. Los cinturones deben ir lo más pegados a la silla que sea posible. En cuanto se meten en el coche deben quitarse el abrigo. En caso de que haga demasiado frío, lo más recomendable es ponerle camisetas interiores térmicas sobre las que puedan llevar un jersey fino.
Algo que está terminantemente prohibido es el uso de gorros, puesto que disminuyen la capacidad auditiva. Y los guantes, salvo que sean especiales para la conducción, están también descartados. Hay que ir pensando qué complementos deben evitar usarse durante la conducción o a la hora de subirse a un vehículo.
En cuanto al calzado, emplear zapatillas o botas con mucha suela o plataforma hace que se pueda perder el tacto con los pedales y dificultar la marcha. Algo similar sucede con los tacones. Es recomendable llevar calzado adecuado para que puedas cambiarte cuando vayas a conducir.