Anabel Pantoja, al igual que todos los invitados al bautizo de la pequeña Ana Rivera Rosales, hija de Kiko Rivera e Irene Rosales, tampoco llevó móvil a la ceremonia por petición de la familia. La propia Anabel confesaba que como no tenía móvil no tuvo más remedio que hablar con la gente. “Me llevé 24 horas hablando con gente”, decía sorprendida Anabel y añadía: “Quiero decirle a todo el mundo que lo pruebe”. “Si me caso, que no creo, lo voy a hacer en mi boda”, concluía Anabel.