Kiko Hernández tenía algo muy importante que comunicar y ha querido representar el momento con pelos y señales. La Policía se personó en su casa para llevarle una notificación en la que figuraba un pago que debía solventar en menos de diez días. María Jesús Campanario le exigía en ese comunicado pagar las costas de un juicio entre ambos del que Kiko salió victorioso.