Tras más de un año en el ojo del huracán desde que confesara su separación y su relación paralela con María Lapiedra, Gustavo González está harto tanto de que se hable de su vida privada como de que se diga que ha traicionado a sus compañeros de ‘Sálvame’. Por todo ello, ha tomado una decisión: “No voy a decir nunca más cómo estoy y cómo me siento”.