Sonia y Alex descubren que su hijo fue cambiado al nacer con otro niño

telecinco.es 19/05/2012 19:05

"Teníamos claro desde el principio que queríamos ser padres", cuenta Sonia mientras Alex explica que "decir que Guillermo fue un niño deseado es quedarse muy corto". Sin embargo, todo cambia cuando Guillermo es ingresado de urgencia. El médico les comunica que Guillermo padece el síndrome de Grotta, una enfermedad genética.

La enfermedad de Guillermo es muy grave. Alex y Sonia no saben cómo afrontarla. El médico intenta calmar a Sonia explicándole que solo el 2 % de los casos son mortales. Sonia encaja fatal la noticia de la enfermedad de su hijo. En ese momento, deciden averiguar cuál le ha transmitido la enfermedad y se hacen pruebas genéticas.

Alex se lleva una gran sorpresa cuando descubre que Guillermo no es su hijo. Un amigo médico le hace dudar de su paternidad. Alex se niega a creer que no sea su hijo. "Guillermo sufre una enfermedad genética y ni su madre ni tú sois portadores. La ecuación es muy fácil", le explica su amigo. Alex se va a casa desolado por la noticia.

La primera reacción es discutir con Sonia y abandonar su casa. Al día siguiente de la mala noticia, Alex y Sonia acuden al hospital donde les comunican que Guillermo no es su hijo. Hubo un error en la clínica e intercambiaron su bebé con otro y están buscando a los padres de Guillermo que a su vez tienen al hijo biológico de la pareja.

La clínica se pone en contacto en ese momento con Luis e Irina. Ellos son los verdaderos padres de Guillermo. Están criando a Pablo, el hijo biológico de Alex y Sonia. A pesar de las reticencias iniciales, acuden a la clínica y allí les dicen que su hijo no es biológico ya que los intercambiaron en el hospital. Luis e Irina no se lo creen y salen de allí sin llegar a un acuerdo.

Alex intenta solucionarlo a través de un abogado pero Sonia decide ir en busca de Irina y se produce un acercamiento entre ellas. Intenta hablar con Irina consciente de que las tácticas de su marido no van a funcionar. Irina se niega a hablar. "No he venido a convencerte de que hagas algo que yo no se si podría hacer", dice Sonia. Irina empieza a confiar en Sonia. Coge a su hijo Pablo por primera vez.

Sin embargo, será un empeoramiento en la enfermedad de Guillermo lo que produce el empujón definitivo. El niño entra en coma tras una crisis y Luis e Irina no pueden negarse a entender que es su hijo biológico. A partir de ese momento, comienzan los trámites para resolver su situación y criar cada uno a su hijo biológico. Tres meses después, las familias celebran juntos el primer cumpleaños de sus hijos.