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El incendio del edificio de Campanar, en Valencia, se ha cobrado ya al menos cuatro víctimas mortales. Aunque aún no ha sido confirmado de manera oficial, se cree que los cadáveres corresponden a una familia de cuatro miembros que se vio sorprendida por las llamas y no pudo abandonar su vivienda.
Se trataría de un matrimonio joven con dos niños pequeños, uno de tres años y una bebé de apenas 15 días de edad, a quienes sus vecinos echaron en falta desde los primeros instantes del incendio, cuando los servicios de emergencias intentaban agruparles en la calle para efectuar un recuento.
Tras casi 24 horas de trabajos de extinción, los bomberos y miembros de la policía científica han logrado acceder al interior de los dos edificios encontrándose con un panorama desolador. 'Vamos a ver' ha hablado con Ricardo San Pietri, uno de los vecinos del edificio que lo ha perdido todo en el incendio.
Ricardo vivía en un piso alquilado con su mujer y su hijo de 17 años, pero en el momento del incendio únicamente el joven estaba en el domicilio: "Me enteré por un mensaje del incendio y llamé a mi hijo para que saliera volando de allí, bajó corriendo a la calle con lo puesto y gracias a Dios se salvó".
Sin embargo, Ricardo conoce a cuatro de las personas que presuntamente no han podido salvar la vida, el matrimonio con dos hijos pequeños que vivía justo en la casa de enfrente: "No sé seguro si son ellos, pero si es así estoy consternado, eran vecinos muy buenos, una lástima muy grande".
En un vídeo publicitario de hace 17 años, la promotora de los edificios calcinados presentaba las viviendas incendiadas como un complejo "vanguardista y singular", con "fachadas revestidas con un innovador material de aluminio". Este material, tal y como explicaba Andrés Pedreira, ingeniero experto en protección de incendios, es un sistema de aislamiento de las fachadas que lleva en la parte exterior un aluminio y en la parte interior un aislamiento térmico que es altamente combustible.
Andrés Pedreira le aseguraba a Joaquín Prat que existen muchos edificios en España construidos con este material, incluso hospitales, y que convendría "hacer revisión de todo lo instalado y efectuar un análisis de riesgo".