Pablo Iglesias: “Es un escándalo que en este país haya gente con empleo que es pobre”

¿Qué promete Podemos a los ciudadanos que le diferencia de los demás partidos?

No somos un partido. Nos hemos tenido que registrar como tal por imperativo legal para poder presentarnos a las elecciones. Somos ciudadanos haciendo política, que es algo muy importante para dejarla en manos de los partidos y de la casta. Por eso hemos hecho unas primarias ciudadanas, las más participadas en la historia de unas elecciones europeas, con 33.000 personas, en las que cualquiera se podía presentar y votar. Tenemos una lista electoral que es una fotografía del país, de los mejores, de gente muy preparada que no se ha pasado muchos años viviendo de cargos públicos.

¿Quiénes forman Podemos?

Yo soy profesor de ciencias políticas; la número dos es Teresa Rodríguez, profesora de secundaria; el número tres es Carlos Giménez Villarejo, ex fiscal anticorrupción y el hombre que más corruptos ha sentado en el banquillo de los acusados; la número cuatro es una licenciada que tuvo que emigrar y que trabaja de camarera; y el número cinco es un investigador del CSIC que tiene un 88% de discapacidad. Así los 50 nombres de ciudadanos de este país que están hartos y que saben que las cosas pueden hacerse mejores.

¿Por qué la clave está en empoderarse?

La Democracia no puede ser elegir entre Coca-Cola y Pepsi, entre PSOE y PP. La Democracia es que el poder está en la gente. La Democracia no puede ser solo dejar una papeleta en las urnas cada cuatro años.

¿Y cómo puede la gente empoderarse?

Lo primero es que los cargos sean revocables. No puede ser que alguien diga una cosa en el programa electoral y luego haga otra distinta. Si esto ocurre tiene que ser revocado. Los cargos públicos se tienen que parecer a sus electores y por eso nosotros hemos decidido limitarnos el sueldo. Nuestros eurodiputados cobrarán tres salarios mínimos españoles, no podrán viajar en business -lo harán como los ciudadanos- y tendrán que rendir cuentas. La clave de la política es que es demasiado importante y no podemos dejarla en manos de los políticos que hemos conocido hasta ahora y en manos de los partidos. La política cuando no la haces tú te la hacen otros y cuando te la hacen otros te roban los derechos, la Democracia y si me apuras la cartera.

Los Círculos son muy importantes para Podemos… ¿cómo funcionan y cómo puede un ciudadano participar en ellos?

Estamos impresionados porque en 100 días hemos tenido más de 300 Círculos dentro de España y en el Extranjero…en Bélgica, Francia, Alemania y también en América Latina. Los Círculos no son células de encuadramiento de partido. Son espacios de discusión ciudadana. Los hay por ciudades o barrios y a nivel sectorial de estudiantes, de mujeres, de profesionales sanitarios, de abogados… Los círculos son espacios de encuentro de la gente y de ejercicio del poder ciudadano.

¿Son algo parecido a las asambleas surgidas a raíz del 15-M en la Puerta del Sol de Madrid?

El 15M es una inspiración. Quienes participan en los Círculos participan también en otros movimientos sociales como la Marea Blanca, la Verde, el movimiento de defensa de la vivienda… Pero son espacios en los que no se pide el carné a nadie, cualquier ciudadano puede participar de un Círculo.

¿Qué vinculación hay, si la hay, entre Podemos y el 15-M?

Quien diga que representa al 15M es un vendedor de ‘crece pelo’. Nadie puede representar a los movimientos sociales. Nosotros nos sentimos representados por los movimientos sociales y ciudadanos que han demostrado en los últimos tiempos cuál es el camino, que es el camino del poder de la gente. En este momento para cambiar esta crisis hay que barrer a esta casta de inútiles que nos gobierna y que la gente tome el poder en sus manos.

¿Cuáles son las claves de Podemos para salir de la crisis?

Lo primero es una reforma fiscal para que paguen los ricos a nivel español y europeo. En segundo lugar, una auditoria pública de la deuda. La deuda de los bancos no la pueden pagar los ciudadanos, la tienen que pagar los bancos. Las entidades financieras nacionalizadas deben estar controladas por los ciudadanos, no puede ser que sigan controladas por directivos con sueldazos que siguen en consejos de administración. No puede haber impunidad. Quienes hayan cometido delitos contra los intereses de los ciudadanos, incluidos los responsables de la crisis, deben sentarse ante un tribunal.

La corrupción no es una cuestión de manzanas podridas en nuestro país. Es una forma de gobierno que permite que manden quienes no se presentan a las elecciones y que han comprado voluntades con maletines de 500 euros. Actuar contra la corrupción implica reformar el código penal y que haya más inspectores de Hacienda que vigilen a las grandes fortunas que nos defraudan a todos.

Hay que decirle al Banco Central Europeo (BCE), a la troika y a Ángela Merkel que no queremos ser una colonia que ofrece mano de obra barata, un país en el que los jóvenes más preparados tienen que emigrar y que nos digan que debemos servir cañitas y tapitas a los ricos del norte. Queremos un país con dignidad.

¿Es posible ofrecer a los jóvenes un empleo en España que no sea precario?

Claro que sí. Lo primero es hacer una reforma fiscal. Desde los años 30 sabemos que de las crisis no se sale empobreciendo más a la gente, sino con inversión pública. Hay quien dice que no hay dinero…claro que lo hay. Buena parte de los bancos españoles tienen filiales en paraísos fiscales, es decir, no pagan impuestos aquí. Quien no paga impuestos en España es un traidor a la patria.

Hay quien va a los campos de fútbol con pulserita rojigualda, que dice ¡España, España! y luego privatiza, externaliza, tienen cuentas en Suiza y filiales de sus empresas o bancos en paraísos fiscales. Zara, por ejemplo, tiene las compras por Internet domiciliadas en Irlanda para no pagar impuestos en España. Si todos los que no pagan impuestos los pagaran se podrían hacer políticas públicas no solo para mejorar el empleo, sino también sus condiciones. Es un escándalo que en este país haya gente con empleo que es pobre.

Antes hablaba de la corrupción como “forma de gobierno”…. La lucha contra la corrupción es importante en vuestro programa, ¿cómo se ataja?

La corrupción se combate con el código penal y con medidas económicas. El modelo de corrupción de este país tiene que ver con la burbuja inmobiliaria y con un modelo de desarrollo fundamentado en pelotazos urbanísticos. No se puede construir un modelo de desarrollo económico que ha generado que la corrupción sea una forma de Gobierno y para eso debe haber una política redistributiva. El Código Penal tiene que actuar contra los corruptos y hay que dejar que la Hacienda pública actúe contra los corruptos. El problema de la corrupción en este país es que se gobierna a favor de una minoría de ricos, que han aumentado su poder adquisitivo desde que empezó la crisis.

El número de millonarios ha crecido un 5,4% y ha aumentado el consumo de productos suntuosos como las obras de arte a las que, por cierto, el Gobierno ha bajado el IVA., al tiempo que la mayor parte de la población está en una situación que, en muchos casos, roza la miseria. Cáritas dice que uno de cada cuatro españoles está en una situación de pobreza. Eso se puede cambiar con la voluntad política de gobernar al favor de tus ciudadanos, y no a favor de una minoría de privilegiados y al dictado de lo que dicen Merkel y el BCE.

¿Qué proyectos en educación tiene Podemos?

Lo primero escuchar a los profesionales de la Educación, a la Marea Verde, profesores y estudiantes, que han dicho que la ley Wert va en contra de la educación pública. Esta ley está convirtiendo la educación, que debería ser un derecho, en un privilegio. La educación no puede ser un privilegio de las élites. No puede ser que haya estudiantes que tengan que dejar de serlo porque no reciben una beca, porque no pueden pagar una matrícula o que haya familias que no puedan pagar el material escolar. Tampoco puede ser que haya segregación de centros en función del barrio en el que vivas. Las democracias se definen por tener sistemas educativos que permite algo que decía Nelson Mandela: una democracia es aquel sistema en el que el hijo de un trabajador puede llegar a ser el presidente o el hijo de un minero el presidente de la mina.

¿Cómo se combaten los desahucios?

Con un decreto de confiscación de las viviendas vacías en manos de los bancos responsables de la crisis. No se puede permitir que a una familia se le niegue algo que viene en la Declaración de los Derechos Humanos, que es dormir bajo techo y disfrutar de una vivienda. Eso se podría hacer poniendo los intereses de las personas por delante de los intereses de las entidades financieras. En este país se rescatan bancos y autopistas y se deberían rescatar personas y con voluntad política es perfectamente viable.

En el programa prometéis independencia respecto de las grandes corporaciones económicas, ¿realmente es posible gobernar al margen de ellas?

Tienen demasiado poder y la manera de Gobernar les da más poder aún. Cuál es la diferencia entre José María Aznar y Felipe González, que a uno le paga Gas Natural y a otro Endesa. Es una cuestión de voluntad política prohibir las puertas giratorias. Es una vergüenza que una persona que ha pasado por un Gobierno autonómico o por un Consejo de Ministros termine en el consejo de administración de empresas estratégicas porque no representan a los ciudadanos sino a quienes les están pagando los favores. Es una vergüenza que Aznar presuma de cobrar 20 veces más que cuando era presidente del Gobierno por estar en un consejo de ddministración. No está allí porque sea un hacha o un lumbrera de la economía, sino porque fue presidente del Gobierno cuando le votaron los ciudadanos. La directiva Villarejo que planteamos establece que cualquier mandato debe durar como máximo ocho años, como el presidente de los EEUU, y después a trabajar como cualquier ciudadano ejerciendo su profesión. Yo creo que al señor Aznar no se le caerían los anillos por trabajar como inspector de Hacienda y a González por trabajar como abogado.

Tras el 25-M que queda para Podemos y para Pablo Iglesias

Tendremos que preguntar a la gente. Cada paso que hemos dado ha sido acordado por miles de personas. A mí me gustaría seguir trabajando en las ciudades y en los barrios y asumir los desafíos electorales, en las municipales, en las autonómicas y en las generales. Y yo estaré donde la gente quiera que esté.