Su tía Milagros tenía una herida en la pierna y por recomendación del médico de esta residencia de ancianos ingreso en el hospital, pero los médicos determinaron que no era necesaria la amputación, simplemente había que tratarla con antibiótico y hacerle curas diarias.

Al destapar la herida comprobaron que había empeorado y se le había gangrenado la pierna. La mujer murió a los pocos días de una infección generalizada

Se investiga al médico y a seis de los enfermeros de una residencia de Cádiz. No es la primera denuncia contra el centro. Hace seis meses se interpuso otra tras la muerte de una anciana a la que se le complicó una úlcera en el pie.