Las normas no escritas de los corredores en San Fermín: prohibido agarrar a los animales o usar el móvil

Esta mañana se ha celebrado el encierro más esperado, el primero de San Fermín. Ha sido multitudinario y algo caótico. A pocos metros de la salida se han producido las primeras caídas de los mozos. Después han sido tres toros los que han acabado por los suelos.

Una escena que también deja momentos poco ejemplares con un corredor llamando la atención del animal que a punto ha estado de cambiar el sentido de la carrera. En este tramo se han vivido las situaciones más peligrosas, con los pitones de los toros rozando literalmente a algunos de los mozos.

Y es que en los encierros hay normas no escritas que los corredores deben seguir. Hay que mantener la calma y correr sin cruzarse es crucial.

Está prohibido recortar, agarrar y llamar la atención de los animales. "Nuestra labor, aunque parezca mentira, es proteger a los toros, no protegemos a los corredores", explica Miguel Reta, pastor desde hace 31 años.

"Yo evito entrar móviles, palos de selfie o con cámaras a la plaza", explica un mozo. También está prohibido correr con chanclas, riñoneras o sacar el móvil en los 848 metros de recorrido. Este martes 8 de julio, es el turno del encierro de los temidos y admirados de la Cebada Gago.