Ibiza desconocida: las secuelas del día más lluvioso desde 1952

Una imagen de las consecuencias del temporal en Ibiza. Telecinco
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Dos días después de las fuertes trombas de agua que descargaron sobre Ibiza, el ritmo de la isla se recupera poco a poco, aunque aún hay carreteras que continúan impracticables, informa Esther Sosa. Estamos ante una Ibiza de paisajes desconocidos tras recibir el martes la mayor cantidad de lluvia registrada en 24 horas desde 1952.

Según los datos recogidos por la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), la estación de Ibiza recogió 254 litros por metro cuadrado de precipitación en apenas 24 horas, más de la mitad de lo que suele llover un año completo 

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No es de extrañar que con estos datos, lo que antes era el acceso a este hotel, es ahora un río.

Raimundo Segarra, Director general de los hoteles Grand Palladium White Island & Grand Palladium Palace  · señala que al estar "en la última parte de la Playa de Bossa, hemos recibido agua tanto de las autovías como de la playa”.

De hecho, aunque el agua no llegó a las habitaciones, 400 clientes fueron desalojados a otros hoteles por precaución. Hoy la huella de la inundación se observa en la sábana de barro que cubre el suelo. “Hoy toca limpieza, toca que se sequen equipos, probarlos, ver qué tal estamos de equipamiento”, reconoce Segarra.

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Motobombas para achicar 300.000 litros por agua a la hora

La UME ha colaborado en las labores de achique con motobombas para retirar el agua de la planta baja "que son capaces de sacar 300 mil litros en una hora”. Como las que utilizan en la carretera del aeropuerto, que continúa completamente anegada. La circulación sigue cortada y el Consell ha proporcionado ya rutas alternativas.

Dos días después de las devastadoras lluvias, algunos propietarios siguen sacando agua de sus negocios. A muchos el lodo ha destrozado sus locales. “De hecho muchos locales tienen que cerrar ya porque estamos casi a final de temporada”. Otros no van a tener más remedio que ponerlo todo nuevo.

Son algunas de las consecuencias del temporal, que complican aún más la vuelta a la normalidad.