Agreden a una enfermera con una navaja en la mano durante una visita domiciliaria en Paterna: la mujer ha cogido la baja laboral
La mujer se defendió danto patadas y manotazos entre gritos y varios vecinos acudieron a ayudarla
Las enfermeras sufren ocho agresiones al día, un total de 2.840 durante 2023 en España
PaternaUna enfermera ha sido perseguida, acorralada y agredida durante una visita domiciliaria en el barrio de la Coma, en Paterna. Los hechos sucedieron el 6 de octubre, cuando la profesional -al desconocer el nombre de las calles porque llevaba tres días trabajando en el centro de salud- preguntó a un vecino por una dirección.
El hombre se ofreció a acompañarla y ella le dijo que no. Pese a su negativa, le siguió y cuando entró al patio la empujó, la arrinconó, la tiró al suelo y le sacó una navaja. La mujer se defendió danto patadas y manotazos entre gritos y varios vecinos acudieron a ayudarla, según el medio ‘Levante’.
El hombre tenía antecedentes delictivos
Las autoridades identificaron al agresor, un varón conocido por sus antecedentes delictivos. La enfermera ha denunciado la agresión y ahora se encuentra de baja por accidente laboral. Los sanitarios han comunicado la noticia a través de un escrito para “visibilizar la situación de inseguridad que afrontan médicos y enfermeros, especialmente durante las visitas domiciliarias, que forman parte esencial de su labor asistencial".
El personal sanitario reclama más seguridad para las visitas domiciliarias, sobre todo para puntos conflictivos. “La mayoría de aquí somos nuevos, porque se producen mucho movimiento de plazas precisamente por la falta de seguridad. ¿Cómo vamos a saber cuáles son los puntos conflictivos?”, lamentan. El servicio sanitario resalta que en el centro de salud sigue sin haber pediatras por un incidente grave que ocurrió hace dos años. Aunque Sanidad afirma que ya hay una plaza asignada que entrará este mes.
Confiesan que hay personas violentas en el barrio
"Consideramos urgente que se tomen medidas efectivas de protección y seguridad para que podamos desempeñar nuestro trabajo sin miedo y en condiciones dignas", recalcan desde el centro de salud de La Coma. Los trabajadores aclaran que no estigmatizan el barrio, pero reconocen que hay varias personas violentas que crean este tipo de situaciones.
"Aunque en el barrio existe una parte de la población educada, respetuosa y colaboradora, también sufrimos la presencia de individuos violentos y conflictivos que ponen en riesgo tanto a los profesionales como a los propios vecinos. Esta convivencia genera estigmatización hacia toda la comunidad, incluso hacia quienes nada tienen que ver con la delincuencia", sentencian tras este caso que reabre el debate sobre las agresiones al personal sanitario.